Muchas organizaciones ante la situación de aislamiento de parte sus miembros interesados (stakeholders) tendrán que adaptarse a nuevos escenarios:
Hacer negocios sin viajar.
Colaborar y compartir sin necesidad de una oficina concurrida.
El puesto de trabajo está en cualquier sitio donde estés.
Los sistemas de producción se controlan y operan de forma segura pero remota.
La automatización de la cadena de producción y de valor, evita las tareas aburridas, sucias y peligrosas sean realizadas por humanos.
Aquellas organizaciones que ya habían avanzado en estás líneas de transformación digital, resisten mejor las consecuencias de la pandemia COVID19, la continuidad del negocio es una necesidad a abordar con las tecnologías de la disrupción digital.